El Libro de las Sombras recoge un año después de que los muchachos cruzaron las dimensiones, descubrieron la magia y lucharon contra el demonio restaurador. Habiendo crecido aparte, se sienten reunidos de nuevo cuando Felix descubre un libro de sombras mágicamente sellado, que involuntariamente libera una poderosa fuerza de caos. Los chicos son a regañadientes atraídos por un enfrentamiento que amenaza a su mundo y sus seres queridos. Tráiler Oficial Tenga en cuenta que los horarios de las sesiones están sujetos a cambios Precios Metro Miembros: 8.00 Adultos: 12.50 Niños: 9.00 Concesión: 9.00 Mayores: 8.00 (incluido té o café) Familias: 36.00 Mar - todos los boletos: 8.00 Espacios de estacionamiento (Haga clic aquí para información de estacionamiento) y justo al lado de transporte de autobús de amperio de trenes, y con espacio para Mamás amp Dads dejar caer a sus niños. Nowhere Boys: The Book of Shadows revisión: Demasiada TV en esta adaptación de la película La respuesta, presumiblemente, está en los nombres detrás del creador de la serie de la cámara fotográfica Tony Ayres, cuyos muchos créditos incluyen la versión de la TV De La bofetada. Y el veterano director David César, cuya mejor película sigue siendo el pequeño clásico Mullet desde 2001. Dado este pedigrí, el apenas de larga duración Nowhere Boys: El Libro de las Sombras es una decepción, un tratamiento completamente televisual de una premisa estándar de bog que podría tener Han sido utilizados por los proveedores de contenidos locales en cualquier momento en las últimas tres décadas. The Nowhere Boys son un cuarteto de estudiantes de secundaria con poderes extra-dimensionales que sólo funcionan correctamente cuando los cuatro están unidos un escenario que conduce al conflicto, especialmente ahora que los miembros del grupo están interesados en las niñas. La política de género aquí es bastante curiosa sobre todo cuando los héroes se enfrentan a la demoníaca Tegan (Angourie Rice de Estas Horas Finales) una colegiala sonriente empeñada en destruir el universo por despecho. Nada de esto se siente exactamente malhumorado, al menos en comparación con la determinada incorrección política de un artículo de basura como la reciente Guía de Scouts del Apocalipsis Zombie. Sin embargo, usted tiene que preguntarse qué mensaje los cineastas pretendían enviar. El problema más grande es que Ayres y César vienen apagado como dabblers well-meaning con poca sensación para el género de la fantasía como tal. Los jóvenes actores son simpáticos por los estándares de los vecinos, pero ni siquiera convincentes a medias como superhéroes en una escala cósmica y los intentos de diálogo ingenioso caer un largo camino por detrás del estándar establecido por el episodio de finales de 1990 de Buffy el Vampiro Slayer. Técnicamente hablando, una comparación más justa podría ser la original Mighty Morphin Power Rangers. Aunque los colores son más silenciados y hay menos luchas extravagantes. Los valores de la producción son cómicamente básicos: los personajes saltan entre dos universos paralelos idénticamente mundanos, deteniéndose en un limbo entre las dimensiones que sugiere un almacén hecho para un Disco subterráneo de luz azul. Los escasos efectos digitales se reducen al mínimo, y las confrontaciones mágicas, organizadas en remiendos no descriptos de matorrales, difícilmente pueden describirse como secuencias de acción en el sentido moderno. A veces, la homeliness tiene un encanto propio, como cuando un gesto mágico hace una fila de los compartimientos del wheelie todo el vuelo abierto inmediatamente. Pero este no es el tipo de cosa que probablemente impresionará a los niños modernos por mucho tiempo. Nowhere Boys: The Book of Shadows revisión: Demasiada televisión en esta adaptación de la película Pocos programas de televisión infantiles australianos se han concedido el honor de un spin-off de pantalla grande, La respuesta, presumiblemente, está en los nombres detrás del creador de la serie de la cámara fotográfica Tony Ayres, cuyos muchos créditos incluyen la versión de la TV de la palmada. Y el veterano director David César, cuya mejor película sigue siendo el pequeño clásico Mullet desde 2001. Dado este pedigrí, el apenas de larga duración Nowhere Boys: El Libro de las Sombras es una decepción, un tratamiento completamente televisual de una premisa estándar de bog que podría tener Han sido utilizados por los proveedores de contenidos locales en cualquier momento en las últimas tres décadas. The Nowhere Boys son un cuarteto de estudiantes de secundaria con poderes extra-dimensionales que sólo funcionan correctamente cuando los cuatro están unidos un escenario que conduce al conflicto, especialmente ahora que los miembros del grupo están interesados en las niñas. La política de género aquí es bastante curiosa sobre todo cuando los héroes se enfrentan a la demoníaca Tegan (Angourie Rice de Estas Horas Finales) una colegiala sonriente empeñada en destruir el universo por despecho. Nada de esto se siente exactamente malhumorado, al menos en comparación con la determinada incorrección política de un artículo de basura como la reciente Guía de Scouts del Apocalipsis Zombie. Sin embargo, usted tiene que preguntarse qué mensaje los cineastas pretendían enviar. El problema más grande es que Ayres y César vienen apagado como dabblers well-meaning con poca sensación para el género de la fantasía como tal. Los jóvenes actores son simpáticos por los estándares de los vecinos, pero ni siquiera convincentes a medias como superhéroes en una escala cósmica y los intentos de diálogo ingenioso caer un largo camino por detrás del estándar establecido por el episodio de finales de 1990 de Buffy el Vampiro Slayer. Desde el punto de vista técnico, una comparación más justa podría ser la original Mighty Morphin Power Rangers. Aunque los colores son más silenciados y hay menos luchas extravagantes. Los valores de la producción son cómicamente básicos: los personajes saltan entre dos universos paralelos idénticamente mundanos, deteniéndose en un limbo entre las dimensiones que sugiere un almacén hecho para un Disco subterráneo de luz azul. Los escasos efectos digitales se reducen al mínimo, y las confrontaciones mágicas, organizadas en remiendos no descriptos de matorrales, difícilmente pueden describirse como secuencias de acción en el sentido moderno. A veces, la homeliness tiene un encanto propio, como cuando un gesto mágico hace una fila de los compartimientos del wheelie todo el vuelo abierto inmediatamente. Pero esto no es el tipo de cosa que pueda impresionar a los niños modernos por mucho tiempo.
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